El Perú puede generar dos nuevos millones de empleos tanto directos como indirectos en la agroexportación, con la puesta en operación de 442,000 hectáreas para esta actividad, indicó hoy el presidente de la Corporación Andina de Fomento (CAF), Luis Carranza.
Refirió que el sector agroexportador es un ejemplo de desarrollo con generación de empleo y reducción de la pobreza, y actualmente hay un millón de puestos de trabajo en la agroexportación entre directos e indirectos, sin contar los empleos inducidos.
Asimismo, señaló que entre el 2000 y 2018 se registró un incremento de la capacidad adquisitiva real de los trabajadores de este sector.
También destacó que en el 2005 el 33% de la Población Económicamente Activa (PEA) se encontraba en el sector agrícola y en el 2018 este porcentaje se situó en 25%, sin embargo, el crecimiento de la productividad laboral fue de 76%.
“Son cifras espectaculares, aparecieron nuevos productos de agroexportación como uvas y paltas, somos los segundos exportadores de palta en el mundo”, subrayó en su presentación en la Conferencia Anual de Ejecutivos CADE 2019.
En ese sentido, dijo que mientras más rápido se concreten los proyectos de irrigación del país, más rápido se podrá reducir la pobreza.
Agroexportación y minería
Carranza enfatizó que la agroexportación y la minería son dos actividades importantes para el desarrollo del país, porque la minería provee los recursos necesarios para cerrar las brechas de infraestructura y el fortalecimiento de las instituciones.
Refirió que la creación de empleo es la mejor garantía para reducir la pobreza e informalidad en el país, y en el caso del sector agroexportador los trabajadores tienen acceso a la seguridad social.
En ese sentido, recomendó que a fin de mejorar la productividad de las empresas, se deben reducir las excesivas regulaciones y los costos logísticos que en el Perú están por encima del 30% del PBI, cuando el promedio en América Latina está en 24% y en Europa en 8%.
Competencia
De otro lado, señaló que la competencia en los mercados es parte fundamental del sistema económico, y el mejor ejemplo es lo sucedido en el sector telecomunicaciones, donde la competencia ha generado una creciente mejora en el servicio.
También señaló que se debe hacer más esfuerzos en el sector educación que garanticen clases medias más comprometidas con el país.
“La educación tiene un impacto muy positivo en el mercado económico”, enfatizó.
Carranza explicó que en la sociedad se necesita el equilibrio de dos fuerzas: la igualdad y la libertad.
“Las sociedades que avanzaron, lo hicieron logrando el equilibro de ambas. Aquellas que no, explotan o se retrasan”, subrayó.
Refirió que el Estado tiene la obligación de defender la libertad y la propiedad.
“Podemos tener progreso económico, pero no desarrollo de clases medias. Por ello se genera confrontación, protestas. Cuando el desarrollo económico genera clases medias, estas presionan al poder político por más transparencia y menos corrupción”, afirmó
Finalmente, consideró fundamental para contrarrestar a quienes se oponen al modelo de libre mercado, “visibilizar” los beneficios que el país ha tenido en los últimos 30 años con este sistema que ha permitido reducir la pobreza.
Luis Carranza participa en la Conferencia Anual de Ejecutivos CADE 2019 que se desarrolla en Paracas, región Ica.