El motivo de este descenso es el menor número de turistas y el cierre de la hostelería, lo cual tuvo un fuerte impacto en la producción ganadera, especialmente en el sector avícola, con una caída del 20% en el consumo de piensos. “Para 2021, se prevé una producción estable. De todos modos, hay una tendencia ascendente analizando la última década”, señaló. Además, dijo que el porcino supone el 43,8% de los piensos, indica Interempresas.
Esperanza Orellana, directora general de Producciones y Mercados Agrarios del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA), estuvo presente en la presentación y definió la importancia del sector de la alimentación animal: “Es un sector que representa el 15% del sector alimentario y es el primer eslabón en el funcionamiento de la cadena cárnico-alimentaria. El año 2020 supuso una anomalía, pero el sector de la alimentación animal, que fue esencial en la época más dura del confinamiento, ha permitido seguir alimentando a los animales y permitir la seguridad en el suministro a los consumidores”.
También se refirió al aumento de los costes de las materias primas: “Gracias a un trabajo realizado por Cesfac, podemos actualizar semanalmente los precios de los piensos compuestos y monitorizar los márgenes de los ganaderos, que es algo muy importante para los ganaderos. A pesar de una excelente cosecha de cereales, los precios de los cereales y oleaginosas se han incrementado de una forma muy notable, por lo que la alimentación animal se ve amenazada por la volatilidad de las materias primas”.