Para finales de este año se prevé lograr la producción de las dosis necesarias de la vacuna Porvac para inmunizar a toda la masa porcina de Cuba contra la peste porcina clásica y comenzar las exportaciones del medicamento.
El Doctor en Ciencias Mario Pablo Estrada García, director de Investigaciones Agropecuarias del Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB), dijo que la medicina, producida por la sede de la institución científica en la provincia de Camagüey, combate la peste porcina clásica (PPC), principal amenaza para los cerdos en el territorio, y comentó que hasta la fecha se ha vacunado en la nación aproximadamente el 15 por ciento de esos animales.
Ha sido posible la inoculación en los centros genéticos, los multiplicadores y los de donantes de pulmones sanos, subrayó el investigador, quien añadió que el fármaco se está registrando además, en su fase final, en Vietnam y Corea del Sur, y también existe mucho interés por el producto en Japón y en China.
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Incorporada al cuadro básico de medicamentos veterinarios en 2017, la “Porvac” implica a su vez un descenso de las pérdidas por sacrificios sanitarios y de la mortalidad en crías y precebas, inhibe la transmisión del virus de la madre al hijo y favorece la alta inmunidad en el rebaño.
En alrededor de 10 millones de dosis se concibe la demanda nacional para contribuir a erradicar la enfermedad, a partir de una vacunación masiva de los animales, según declaró recientemente a la ACN Nemecio González Fernández, director del CIGB en la región camagüeyana.
La PPC es una enfermedad causada por un viral infectocontagiosa propia de la especie porcina, que afecta a los cerdos domésticos y silvestres, y se encuentra muy difundida en el mundo.
Se trasmite de las madres a sus crías y por contacto directo entre cerdos sanos con enfermos o portadores, con síntomas como fiebre, anorexia, letargia, hemorragias, cianosis, conjuntivitis, estreñimiento transitorio seguido de diarrea, vómitos ocasionales, disnea, tos, ataxia, convulsiones, postración, apetito irregular, retraso del crecimiento, aborto entre otros, hasta la muerte.
Porvac resulta una vacuna de subunidad proteica que elimina la transmisión del virus entre los cerdos que conviven y de madres a hijos, brinda protección temprana a partir de los siete días de vacunados por más de seis meses con dos dosis, y permite realizar diagnósticos diferenciados entre animales portadores y sanos.
Otra vacuna veterinaria registrada por el CIGB es la Gavac, dirigida contra la garrapata del género Rhipicephalus (boophilus) microplus, y que suma más de dos décadas de aplicación en la nación caribeña, con probada eficacia también en países como Venezuela, Brasil, Colombia, Nicaragua y México. (Agencia Cubana de Noticias)
