En las últimas dos semanas, los precios de algunos productos cárnicos como la res y el pollo han tenido incrementos de entre 10 y 20 pesos, golpeando con ello a la economía de los sectores más vulnerables.
En todo el país y particularmente en la entidad, donde aún prevalecen los estragos económicos por la pandemia de covid-19, los precios de los productos básicos para las familias no dejan de elevarse, representando un duro golpe a los pilares de los hogares.
De acuerdo con la información obtenida con comerciantes y amas de casa, los productos que más incrementaron sus costos son el pollo, la carne de res, así como la carne de cerdo.
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Guadalupe García, ama de casa de la colonia San Francisco que de manera periódica realiza la compra semanal de comida en los mercados del centro de Tuxtla, precisó que el pollo estaba (hasta hace ocho días atrás) en 60 pesos el kilo y pasó a 70, mientras que la carne de res de 120 pesos, en algunos casos, ahora la están ofertando hasta en 140 pesos.
Los vendedores dieron a conocer que al menos en el estado de Chiapas los distribuidores de estos productos están dejando de traer carne al territorio por motivos desconocidos.
A ello se le debe de sumar el alza a los combustibles, los costos en las tarifas de energía eléctrica, factores que encarecen los precios de transportación, almacenamiento y procesamiento.
Estos incrementos se han dado de manera repentina, por ello han tenido que prescindir de otras cosas para abastecerse de la comida que es algo esencial.
Pero de todos estos productos, la carne de puerco es el producto cárnico que más ha elevado su precio en los últimos días, pasando de 90 pesos a 100, luego a 110, y en estos momentos el kilo de carne de puerco alcanza los 120 pesos.
Cabe recordar que tan sólo en estos siete meses del 2021, los precios de las carnes han tenido variaciones de manera constante.
Es decir, la carne de pollo ha subido en tres ocasiones y por lo consiguiente la carne de cerdo también, mientras que la carne de res en una ocasión, sin embargo, en este último caso depende de los establecimientos, si lo aplican o no.
Lamentablemente estos no son los únicos productos que han incrementado su precio. En este mismo lapso, el tomate que estaba a 18 pesos pasó a 23 pesos, el aguacate de 55 pesos pasó a 70 pesos por kilogramo.
Las amas de casa lamentan que estos incrementos se den de manera repentina, por lo que en la mayoría de los casos han tenido que apretarse el cinturón o llevar una menor cantidad para el consumo en el hogar.
